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¿Qué son los prejuicios y cómo se forman?

publicado en: Psicología y Salud Sevilla | 2

Los prejuicios son actitudes generalmente negativas hacia los miembros de un grupo social, pero basado únicamente en la pertenencia. Es un juicio previo porque antes de conocer a la persona en concreto o al grupo al que pertenece, ya se tiene una opinión formada -generalmente, llena de tópicos-, aunque también existen prejuicios positivos, como por ejemplo la inteligencia de los asiáticos o la capacidad de trabajo de los alemanes.

La discriminación es un comportamiento negativo.

Que el prejuicio sea una actitud, implica dos consecuencias:

  1. Funciona con un esquema cognitivo que nos ayuda a ordenar, a clasificar la información sobre los grupos sociales. Prestamos más atención a la¿Qué son los prejuicios y cómo se forman? información más oportuna para el prejuicio, con lo que la recordamos mejor.
  2. No sólo incluye evaluaciones negativas, sino que también incluyen emociones negativas (en este caso por ser el prejuicio, aunque esto no quiere decir que todas las actitudes tengan evaluaciones o emociones negativas). Los componentes negativos del prejuicio están muy relacionados entre sí.

Al pensar en el prejuicio, se suele pensar en las cargas emocionales, no en los prejuicios raciales-étnicos-religiosos, pero la verdad es que existe una relación muy estrecha entre el componente cognitivo (el estereotipo) y los componentes afectivos. 

El componente cognitivo del prejuicio (el estereotipo) funciona como un mecanismo de ahorro cognitivo. Cuando nos encontramos con una persona que hemos estereotipado, nuestras actitudes y nuestra forma de percibir a esa persona saltan inmediatamente. Por eso, es tan difícil de eliminar un prejuicio, porque cumple una función cognitiva, es decir, una utilidad.

Orígenes del prejuicio

Existen tres teorías básicas sobre los prejuicios:

  • Teoría del prejuicio directo intergrupal, o lo que es lo mismo, la competición como fuente del prejuicio: El prejuicio es consecuencia de la competición entre los grupos que se produce por conseguir ciertos recursos escasos (bienes valorados o comodidades). A media que se prolonga la competición en el tiempo, la situación de posición de partida se va recrudeciendo (haciéndose por la percepción negativa del grupo rival). En el experimento de Sherif en un campamento, cada grupo jugaba al mismo juego, luego se introdujo la competición creándose cada vez más violencia, para luego intentar con tareas cooperativas disminuir ese prejuicio creado y la violencia existente, consiguiendo así, algunas amistades intergrupales.
  • Teoría del rol del aprendizaje social: el prejuicio es aprendido a través de personas cercanas a nosotros (familiares, amigos…), especialmente por observación. Muchas veces adoptamos los prejuicios para pertenecer a un determinado grupo social. Los medios de comunicación social juegan un papel importante en el desarrollo de los prejuicios.
  • Teoría de la categorización social: generalmente, las personas vemos a las demás como pertenecientes a nuestro grupo u a otro. Esta distinción se debe a múltiples variables (raza, sexo, edad…) y tiene implicación con:
    • los sentimientos y las creencias: las personas del mismo grupo que nosotros (endogrupo) se perciben como personas más favorables, en cambio, las personas de otro grupo (exogrupo) se perciben más homogéneas (= todos son similares).
    • la atribución y la explicación de las conductas: atribuimos las conductas favorables a comportamientos del endogrupo a causas internas y estables, en cambio, atribuimos las conductas favorables del exogrupo a causas externas e inestables.

Los estereotipos

El componente cognitivo del prejuicio es el estereotipo, que es la creencia que tenemos en que todos los miembros de un grupo comparten determinadas características y que actúan de una forma similar; éste puede no estar justificado (no tener base) o tener una cierta justificación (en los casos en que hay una cierta base y el estereotipo es erróneo por la sobregeneralización (como por ejemplo, en que todos los suecos son rubios y altos).

Los estereotipos son marcos cognitivos formados por conocimientos y creencias de grupos sociales y específicos que implican la generalización de características típicas a miembros de esos grupos sociales.

Al igual que las actitudes, los estereotipos son atajos cognitivos que nos permiten de forma rápida comprender el comportamiento de los demás y procesar la información. La información que está relacionada con nuestros estereotipos se procesa de forma más rápida y, al mismo tiempo, a la información que es más consistente con nuestros estereotipos se le presta más atención (la que es menos consistente es rechazada y negada). Los estereotipos producen ahorros cognitivos de la información.

En un principio se creía que los estereotipos actuaban a través de los sentimientos, pero en los últimos años se ha demostrado que también tienen un impacto en nuestros pensamientos a través de las emociones, considerándose actualmente que actúan a través tanto de las emociones como de las cogniciones. 

También se produce lo que se denomina la correlación ilusoria, que es la tendencia a sobreestimar la tasa de comportamientos negativos en grupos relativamente pequeños. Este fenómeno nos ayuda a entender y explicar por qué los miembros de los grupos mayoritarios suelen atribuir comportamientos y tendencias negativas a los grupos minoritarios (“los blancos tienden a correlacionar ser negro con los delitos”). Los hechos distintivos (esto es, la información que nos llama más la atención) se codifican de forma más rica y accesible. Cuando llevamos a cabo juicios relacionados con la información distintiva tendemos a recuperar mucho más fuerte e intensamente esa sobrevaloración y con más frecuencia (“para un blanco en EE.UU. pertenecer a una minoría étnica nos llama más la atención”). Ante dos hechos que son distintivos, cada vez vamos a recuperar más fácilmente los ejemplos y a subestimar la relación entre ellos. Investigaciones posteriores han encontrado que no es tan relevante que la información sea tan distintiva al principio porque ésta puede ser en momentos posteriores y producir una correlación ilusoria cuando tenga lugar.

 

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Psicólogo en Sevilla

Federico Casado Reina, Psicólogo colegiado AN-07920. Especialista en Psicopatología y Salud. Tlf: 655 620 045

2 comentarios

  1. Stella

    Cordial Saludo Dr. Casado
    Leyendo en la web sobre los prejuicios, encontre su página, me encanto el comentario y me ayuda a tener una perspectiva de cambio frenta a los prejuicios que he manejado en mi vida, muchas gracias.
    Queria hacerle una pregunta, tengo 57 años, pero lidio con un persepción de mucha sensibilidad en mis
    relaciones personales, si no me hablan o no me tienen en cuenta me siento mal, sufri rechazo de mis padres cuando era un bebe, y a lo largo de mi vida y en relacion con ellos y mis hermanos, no sabe cuanto me afecta eso en mi area relacional,hubo situaciones muy fuertes en mi filia de rechazo y en oportunidades de agresion fisica, mis padres obviamente nunca entendieron el daño tan grande que hacia a la filia, soy insegura, manejo una baja autoestima, deseo con todo mi corazón casarme pero vi el fracaso en casa con mis padres y hnos y en cierta forma tengo miedo, a no ser una persona que pueda sustentar un matrimonio, deseo crecer y madurar en mi vida, superar tanto comlplejo, manejar mejores relaciones interpersonales.

    Sin más por el momento, gracias por atender esta nota.

    Siinceramente,

    Stella

    • Federico Casado Reina

      Saludos Stella,

      Aunque tendría que realizar una evaluación más exhaustiva, creo que lo más indicado es que realizaras una terapia para superar la dependencia emocional, que por tu relato creo que padeces, y mejorar tu autoestima.
      Un saludo.

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